El pasado día 4 de noviembre, a raíz de la exposición del libro Las estrellas de la arquitectura, surgió un debate en torno a cules deberían ser los criterios a seguir de una guía michelin, de una guía de arquitectura, ya que ésta busca lo llamativo, llamar la atención, lo que está de moda.
En la guia michelin que hoy tenemos a nuestra disposicion se nos ofrece una arquitectura bastante mala en compración con las magnificas obras de arte que podemos encontrar. Pero es cierto que todos hemos hecho uso de esta guía en más de una ocasión porque resulta muy cómodo, y quedamos satisfechos de la arquitectura que nos muestra. Sin embargo, quedan ocultas muchas de las maravillas que podemos encontrar, que al no guiarse por la moda o al no ser llamativas no las encontramos en esta guía; y cómo además el público no es consciente de lo que se nos escapa cuando visita una ciudad, quedan satisfechos con lo poco que han visto, en vez de buscar, explorar por ellos mismos.
Por eso, desde mi punto de vista, habria que visitar las ciudades como lo haría un nómada, vagabundeando sin rumbo, sin objetivo, sin hacer uso de ningún tipo de guía, pues todas están incompletas. Es necesario explorar la ciudad y contruirse cada uno su propia guía que luego poniendo en común con las demás llegaría a formar una guía michelin mucho mas completa, puesto que cada persona tiene un modo de ver la arquitectura distinto, y eficiente que la que se nos ofrece hoy en día que solo nos muestra la arquitectura más llamativa de cada lugar.
En conclusión, el público, el turista, debería seguir sus PROPIOS criterios, los que cada uno se proponga seguir, sin ningún tipo de influencia externa, y hacer su propia guía personal de arquitectura, que posteriormente al poner en común todas ellas conseguiremos formar una guía michelin mucho mejor de la que actualmente disponemos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario